delsur, que bueno que hablas y exteriorizas lo que sientes, mira yo no soy psicóloga ni terapeuta creo que la que podria hablar con mas propiedad sería Garo pero igual como mujer te puedo dar mi opinión y claro si GAro apoya para que ella también aporte ideas.
Creo que debes retomar la relación romántica con tu esposo, el hecho de que queramos embarazarnos no implica que no podamos disfrutar de la pareja, intenta volver a los días cuando recién empezaban a estar juntos, prepara una cena rica, música suave, velas, etc para propiciar el momento perfecto. Ademas piensa esto: te gustaría que tu chico vaya a buscar afuera lo que no tiene en casa???

yo supongo que no verdad?
Ademas si tu pareja se da cuenta que solo lo buscas en los "dias fértiles" se sentirá utilizado y con toda la razón!! recuerda que el es a quien eligiste como padre de tus hijos y compañero de vida.
También el estress y la tensión pueden estar jugando con tus hormonas y esto baja el libido y por lo tanto el deseo sexual,asi que no pienses en embarazarte solo piensa en disfrutar, relajarte, divertirte, etc.
Puedes también irte a un hotel para dar mas "sabor" al encuentro, buscar alguna comida afrodisiaca, escaparte al cine y portarte traviesa , etc, etc,. puedes hacer muchas cosas pero por favor NO DESCUIDES a tu pareja.
Recuerda que contrario a lo que se cree, primero debes estar bien con tu esposo para poder tener un hogar sano y armonioso para tus hijos.
Y finalmente creo que deberías hablarlo con él, decirle como te sientes y que el te ayude a estimularte sin presionarte para mejorar su relación.
Me tomé la libertad de copiarte aquí algo que encontré en internet espero te ayude.
Un exceso de ansiedad imposibilita tener relaciones sexuales satisfactorias
La falta de interés para emprender relaciones sexuales, desechadas las causas médicas o fisiológicas (problemas endocrinos, trastornos hormonales, insuficiencia renal o tratamientos farmacológicos) y las psicológicas (una educación excesivamente estricta o baja autoestima, por ejemplo), se encuentra muy a menudo ligada al modo de vida de quien padece apatía sexual.
El estrés, el exceso de cargas laborales o familiares y la incapacidad para afrontar la ansiedad que estas situaciones generan explican a menudo la inapetencia sexual.
El estrés puede terminar "matando" la libido, aunque de manera lenta y gradual. La causa está en la testosterona, principal agente del deseo sexual. Si ésta disminuye, también es menor la libido. Pero, además, el estrés hace que aumente el nivel de cortisol en la sangre, una hormona esteroide producida por la corteza suprarrenal. El alto nivel de cortisol reprime la mayoría de las funciones orgánicas, incluyendo las funciones sexuales y reproductivas. "Siempre que aparecen síntomas de apatía sexual en hombres que solían tener la libido alta, hay que prestar atención al cansancio, ya que el ritmo de vida, los problemas cotidianos y la fatiga hacen que las ganas de mantener relaciones sexuales disminuyan notablemente".
Cuando se acumula tensión, si las situaciones nos superan, se produce un bloqueo. Y el plano sexual no es una excepción. Por ello, generalmente, El estrés influye en el deseo, favoreciendo la apatía e inhibiendo la respuesta sexual.
SOLUCIONES
El tratamiento terapéutico, detalla el terapeuta sexual Carlos San Martín, se basa sobre todo en la enseñanza de nuevos hábitos que ayudan a manejar el estrés, como la respiración, la relajación o la revisión de la escala de valores del individuo afectado. Los cambios conductuales que proponen los expertos para llegar a la superación del trastorno sexual se basan en técnicas para combatir el estrés:
Razonar: No se debe dejar pasar de largo el problema, sino afrontarlo y reflexionar sobre los motivos que llevan a sentir la angustia y la ansiedad que bloquean los sentidos. Tomar conciencia de que no sólo afecta al plano sexual, observar qué otros aspectos de la vida cotidiana se ven resentidos.
Relajarse: Darse cuenta de que el estrés es variable y no durará siempre y relativizar la importancia de no sentir deseo sexual en algunos momentos determinados. Lo peor es obsesionarse.
Tener calidad de vida: Eliminar los excesos, tanto en el trabajo como en la realización de actividades físicas agotadoras.
Establecer prioridades claras: No siempre está en nuestras manos eliminar preocupaciones como enfermedades, problemas económicos o familiares. Pero sí depende de cada uno de nosotros 'saber vivir a pesar de', poniendo un orden de prioridades y dando a cada situación y problema la importancia que merece, no más.
Cómo afrontar el problema en pareja
Los médicos consultados aconsejan seguir estas pautas para hacerle frente al problema que supone la falta de apetito sexual:
Fuera prisas: No hay que tener apremio por volver a mantener la vida sexual normal, ya que puede generar más ansiedad en la persona afectada.
Diálogo: Como para cualquier otra situación de crisis por la que atraviese la pareja, la comunicación y compartir el problema entre los dos miembros es lo más importante.
Análisis: Observar con calma la situación para abordar las posibles soluciones, sin provocar un drama por un cambio circunstancial en los hábitos sexuales de la pareja.
Imaginación: Es importante mantener un poco de suspense en la pareja, que no se pierda la "magia" de los primeros encuentros. A largo plazo, la seguridad adormece los instintos y si la tensión acumulada es muy grande aún se anestesian más.
BUENO DELSUR, ESPERO QUE NO TE HAYAS DORMIDO CON TANTO QUE LEER, SOLO INTENTO AYUDARTE UN POCO.
UN ABRAZOTE!!!!
